EL AMANTE MULA

A estas alturas de mi vida me he topado para mi desgracia, y en contra de mis afiatadas creencias, con la peor especie masculina que pisa la faz de la tierra: UN AMANTE MULA.
Así es, un amante quien destacaba por su fabuloso desempeño y que tenia la fantástica virtud del cero compromiso, me ha defraudado con creces, y quise escribir este post como signo de mi profundo descontento.
Hoy ha venido a visitarme mi más reciente ex amante, visita en la que tenía puesta muchísimas expectativas, ya que debo recalcar, este tipo alcanzaba en un lamentable pasado ido, un desempeño casi circense, camísticamente hablando.

Resultó ser, que en todo este tiempo transcurrido (porque entre mi ex amante y yo siempre hay lapsus de tiempo entre cada uno de nuestros encuentros sexópatas) parece que mi querido buen tirador, tiró el poto para las moras y se convirtió en un ser simple que no sabe tomar la vida con humor.
La excusa de nuestra prematura cita fue “aprendamos a poner el condón con la boca”, por ponerle un nombre, así como si fuera un seminario de enseñanzas sexuales en el que yo soy la desaplicada alumna que necesita un severo castigo, y él, el rígido pero sabelotodo profesor.
No digo con mucha felicidad que el encuentro fue un completo fiasco ya que al sujeto en cuestión le bajó la culpabilidad de serle infiel a su novia... (en esta parte del relato debería sonar la trompeta del chacal!)

Bueno, aparte de tan patético detalle, ya que nada peor, de más mal gusto y de menos clase, que el amante con remordimientos, porque para andarselas dando del aquí te las traigo Peter hay que tener cojones y ser bien hombre, ya que la compañera de cogida nunca jamás es la indicada para escuchar este tipo de aberraciones, muchísimo menos yo que nada podría importarme menos que un novio arrepentido... Obvio, que me importa a mi la noviecita santurrona de otro, si me tiro al pololito, está más que claro que es un tema que no me compete... No te parece lógico, querido??!! Por lo visto lo tuyo no es el tino!
Pero lo que siguió fue peor, o sea en verdad el comentario anterior tan innecesario fue post coito, el problema empezó mucho antes. La acción en sí no tuvo absolutamente ninguna gracia, apurada, incomoda y muy al lote, sin calentamiento previo ni nada que se le pareciera y lo peor, porque este si que es el peor de los pecados… Sin besos! Y ante mi descontento expresado por esto, el resultado fueron besos fingidos y a la fuerza... Digo yo, estos cretinos creerán que a una le gusta follar como puta?? La verdad es que a mi para nada, y aunque quizás la situación turbia lo ameritara, pues la verdad es que no se me ocurre otra manera de encender pasiones, si es por eso mejor me compro un amigo a pilas y me ahorro el discurso que tuve que escuchar, porque puta que algunos tarados se ven harto más lindos con la boca bien cerrada!

Ahhhhhhh!!! Porque mis bellos oídos también tuvieron que escuchar un “que quede claro que esto es solo un experimento científico de postura de condón”, lo cual en otra situación habría sido un comentario de lo más simpático y juguetón, pero que esta vez tenía otra connotación, a mi parecer bastante deleznable.

Para finalizar, mi ex amante terminó todo el asunto con el peor de los comentarios, si es que esto fuese posibel, porque por último el de “mi polola bla bla bla” es un discurso conocido, pero el que le siguió fue realmente indecente: ESTA SI QUE ES LA ÚLTIMA VEZ!... Chan, chan!!

En el minuto no supe que decirle porque lo encontré tan profundamente desubicado, extra y fuera de lugar que me quedé WTF! PLOP! ALO?! CRI CRI! y todos los derivados de anonadaciones mamiferamente conjugables.

Lo único que puedo sacar en limpio, esque estos amantes del tipo mula son por lo visto, con excesivos delirios de grandeza …

RESUMIENDO, la cosa es que no supe que contestarle porque nunca me habían dicho algo tan -llamémosle- original. Pero la verdad cariño, me di la molestia de meditarlo y te lo digo ahora:

NO PROBLEM! Lo comido y lo bailado no me lo quita nadie. Ya perdiste el plus de amante, ya no tienes gracia ni emoción, y al cabo que ni quería, seguir durmiendo mi siesta hubiera sido una bastante mejor opción.